Teniendo la necesidad inherente al desarrollo humano que es la de comunicarse, el hombre ha desarrollado estrategias de comunicación para interactuar, enviar y recibir mensajes con otros seres humanos, una de esas estrategias es la utilización de imágenes, ya que como ser visual, ha utilizado el sentido de la vista para recopilar información del exterior.

Primordialmente, el lenguaje ha sido uno de sus mejores aliados, pero se ha estudiado también la semiótica de la imagen, con la cual, por medio de la creación de códigos, ha relacionado conocimientos con otros seres humanos durante el complejo proceso de la comunicación, donde el plano del significante se convierte en la expresión, y el plano del significado se convierte en el contenido, por lo que ahora la significación se asume como un acto que relaciona el significante y el significado; Lo que da como resultado de esta relación es el signo. Algo relevante de mencionar es que el valor del signo está determinado por su entorno, o lo que es lo mismo, el contexto.

Según Jakobson, el texto es lo que le sigue a la expresión oral, es decir, es la escritura que produce la expresión oral, para que todo esto se lleve a cabo debe existir una coherencia que permita conocer de lo que se habla, en este sentido con la imagen pasa lo mismo ya que es necesario conocer lo que se está percibiendo o leyendo y que permita la interpretación, ya que la noción de coherencia visual no puede ser entendida sin la noción de competencia discursiva el lector de la imagen.

Algo importante que los comunicadores visuales deben saber son los niveles pertinentes al análisis de la imagen que son: 1.- Nivel de la materia de la expresión, 2.- Niveles textuales de la imagen o isotopías visuales, 3.- Aportes de la teoría de la enunciación y la teoría del discurso, 4.- Estructuras narrativas y 5.- Los niveles de género. Se parte de que la imagen tiene como unidad elemental la mancha, compuesta de espacio y color, soportada por la superficie o el fondo, para diferenciar el fondo y figura, misma que para que esta exista debe de presentarse sub diferencias de color, de valor, de tono, de materia o de grano. Cuando el diseñador logra captar y transmitir estos elementos en sus diseños visuales, se puede decir que al observador le será mucho más fácil leer la imagen y procesar la información de manera menos complicada, asegurando así la correcta transmisión del mensaje, que sí bien es cierto que la interpretación del lector sobre la imagen no solo se basa en la percepción, sino también depende de la competencia lingüística, la activación de estructuras cognitivas y de memoria que se generan en los observadores a través de la vista son relevantes para el entendimiento y captación del mensaje.

Por el lado de la fotografía, uno de los elementos visuales fundamentales es el contraste, por el poder representativo que este tiene sobre la imagen, pudiendo el observador concentrarse solamente en el elemento expresivo, sin dejar a un lado las cuestiones como el encuadre, el uso de objetivos, la iluminación, angulación, etc. Es importante entonces observar la fotografía y analizarla a partir de una forma espacial significante para encontrar su coherencia textual-visual. Apoyados del contraste es posible identificar a una imagen como nítido o no nítido y por el otro lado percibir el fondo y figura, estas características, están ubicadas dentro de un primer nivel de lectura. Por otro lado el contraste denominado como densidad, claro,oscuro, sombra pertenecen a la expresión que se le denomina valor. Una vez analizados estos datos, los comunicadores pueden inferir en algunas de las percepciones de los observadores y así mismo manipular las imágenes con el objetivo de alterar esas percepciones y lograr así diferentes reacciones como se hace evidente en las campañas publicitarias, donde la imagen juega un papel importante que muchas veces está por encima del texto, ya que es a través de las imágenes solamente por las cuales se le comunica a los consumidores el beneficio y algunas veces el perjuicio de consumir determinados productos.

El plano, la escala, el color, la luz, el contraste, son elementos que apoyan a la presentación de las imágenes las cuales comunican un mensaje, por ejemplo ver un paisaje de día, de tarde o de noche puede utilizarse en contextos diferentes dentro de algún comercial televisivo, en el cual con cada escenario se comunicaran mensajes para provocar sensaciones diferentes.

En algunas ocasiones la presentación de imágenes se presentan en movimiento como en el caso del cómic o las fotonovelas, donde la historia narrada es apoyada a través de ilustraciones o fotografías las cuales enriquecen de gran manera el texto expuesto dentro del código lingüístico llamado “globo” con el cual se van contando las historias.

En términos generales, la utilización de imágenes visuales como elementos que pueden leerse es hoy en día de gran relevancia en la vida diaria, ya que podemos recibimos constantemente información sin necesidad de tener que leer textos escritos, simplemente se nos presentan las imágenes, de las cuales podemos hacer una lectura visual y abstraer el mensaje, lo que nos comunican, la indicación que nos dan, etc., es importante que todos los comunicadores visuales se tomen la tarea de analizar los elementos descritos anteriormente para hacer una comunicación efectiva, que no deje lugar a dudas dentro de los ámbitos cognitivos del observador